Pues va a ser que sí...

Ya están aquí. Y traen hambre atrasada... ¡¡¡LOS EXÁMENES!!! Otra vez a morir de asco encerrados en casa mientras las señoras – desconsideradas como ellas solas – sacan a los niños al parque y oyes desde la ventana cómo les obligan a comerse la merienda. “Señora, como baje yo me la como a usted, por chillona”. Otra vez a convertir reprografía en un segundo hogar, a arrepentirse de todas esas cervecitas que te tomaste mientras se explicaba ese jodido problema de economía, al olor de la biblioteca... Otra vez a contemplar una habitación alfombrada con folios, a alimentarse de café, a dormir nada, a soportar los nervios. Otra vez a ver como Fulanita está tan –jodidamente- tranquila porque se lo sabe todo desde antes de empezar el curso, a las ojeras de Morticia, a las niñas de las rodilleras haciendo ejercicios de mandíbula... Y sí, qué carajo, que es sólo un mes y luego veranito, piscinita, pindongueo, pero... ¡¡¡ODIO JUNIOOOOOOO!!!

(Os lo advertimos... nada de posts felices en una temporada... consúmase con moderación. Saludazos y suerte a los exclavos como nosotras.)